Hiatus

No es que esté súper ocupado y sin tiempo alguno, de hecho estoy tratando de ocuparlo todo lo que puedo y más (razón por la que el lunes empiezo también en el gimnasio). Es cierto que he tenido unos días en los que me aburría soberanamente ésto y no encontraba sentido en lo que escribía, ni consideraba que los blogs fuesen algo relevante o que tu vida le interesara a alguien realmente. He dudado incluso de mis cualidades creativas, no considerándome fotógrafo ni tampoco un buen diseñador gráfico, sino algo corriente y moliente sin interés, dudando incluso de seguir renovando mi galería. Lo que me está pasando es que desde que empezó el año voy de crisis en crisis, con unos cambios de humor sorprendentes y una autoestima variable, como me ha dicho mi psicóloga particular. Tengo días en los que me miro al espejo y, bueno, perdón, días en los que es mejor no mirarse al espejo; días en los que, como ya he dicho, he perdido mi valor artístico y días en los que siento como si el mundo se estuviera riendo de mí o estuviera en contra de mí. Días en los que algo te recuerda lo imposible y difícil que resulta encontrar a alguien en condiciones en un mundo en el que todo Dios parece haberle encontrado ya. Días en los que la tristeza y el recuerdo pesan de mala manera sobre tu existencia (lo acabo de sacar de un libro de Erich Segal, no me hagáis tan poético) y días en los que te haces a la idea de que donde mejor se está es en casa, sin contacto con el mundo exterior. Estas son las razones por las que no he actualizado en dos semanas más o menos, porque ya no me apetecía ponerme divertido/payaso/frívolo para fingir que no pasa nada y que estoy bien. Espero de corazón que esta fase concluya ya mismo, porque pondré de mi parte para que así sea.

Por favor no quiero comentarios en plan "actualiza cuando quieras, esto no es una obligación", porque ya sé que no es ninguna obligación, pero en el mismo momento en que tienes un blog y un público que te lee y al que tú lees, es de agradecer que se expliquen según qué cosas ante un periodo más o menos largo de desinformación. O lo que es lo mismo: que no estoy bien y me apetecía compartirlo con vosotros.

La semana que viene Marsónico volverá a las andadas.