6.8.09

Genialidades


















Que un viaje en tren de 4 horas para pasar unas semanas en tu ciudad natal se pase tremendamente rápido y tengas la sensación de que, aunque te da pena dejar Madrid y a tu novio, te apetece enormemente ver a tu familia y estar en tu casa, tu calle y tu pueblo.

El retorno de una de mis mujeres favoritas, la supermodelo superandrógina Kristen McMenamy, a las páginas de Vogue Italia de las manos del genio Steven Meisel en una editorial de más de 30 páginas con unas fotos dignas de enmarcar.

El pan de centeno tostado, la mostaza para salmón y la crema de salmón de Ikea Food.

Haber terminado al fin con la mudanza madrileña y poder ver el nuevo piso como algo más próximo a lo que nosotros llamamos casa.

Los efectos especiales de la última entrega de Harry Potter y poder ver más metraje de las fantásticas Bellatrix Lestrange y Luna Lovegood.

La nueva Barbie Afrodita...

Los almuerzos en la piscina de Lago a la sombra de los pinos y sentirte como en un picnic en el campo, y rematar la faena con unas cañas en las terrazas que hay frente al enorme chorro de agua.

Despedirme momentáneamente de Madrid con una divertida comida en el Lateral de Fuencarral en compañía de La Marquesa, La Duquesa y La Gran Señora.

Habernos librado de la travesti inmunda y poder dormir en paz en la habitación que parece una tarta de fresa y limón.