31.12.08

2008 retrospectivo




















Llevaba ya tres meses y pico sin escribir en Rayos D y, honestamente, no lo echaba en falta. He dejado de visitar blogs, fotologs, twitters, twenties, facebooks, myspaces y demás bitácoras digitales por diversas razones, una de ellas la sobresaturación de éstas; otra, la falta de originalidad y la repetición constante y galopante en todas y cada una de ellas; y una más, el gremio de izquierdistas/comunistas/rojillos que abunda por estos lares y que cuando uno opina de un modo distinto a ellos, ya es, cuanto menos, un fascista de pro. ¡Así me gusta, dando ejemplo en cuanto a tolerancia, chicos, vosotros que tanto defendéis eso! (nota: hace ya algunos posts que dejé bien claro que yo no me posicionaba ni a favor de derechistas ni de izquierdistas) Por todos estos motivos, y por varios más, este verano decidí que todo me parecía una soberana mierda y que no me apetecía seguir leyendo, ni mucho menos comentando, lo que escribía una serie de personas cuyos pensamientos nada tenían que ver con los míos. Y precisamente por haberme pronunciado este año respecto a varios asuntos sociales y políticos, me he ganado la enemistad de gran parte de la blogosfera. Seamos sinceros (parafraseándome a mí mismo en un antiguo post): vosotros tampoco me gustáis un pelo. Uno escribe un blog para que los demás le dejen comentarios, pero no nos engañemos, la mayoría de comentarios se dejan por cortesía y por cumplir, y como todo eso no me interesa hace ya bastante tiempo que deshabilité la opción de poder comentar en mi blog, para luego no tener que hacerlo yo con el resto. Que siga leyendo a uno o dos ya es otra historia, pero vamos, poquita cosa. Gunillo sabía perfectamente que me negaba a publicar este post contando lo que voy a contar, pero hoy sí me apetecía para dar carpetazo a estos doce meses.

Este año que está a punto de finalizar ha sido testigo de algunos acontecimientos tanto buenos como malos. En cuanto a estos últimos, gracias a Dios todo se solucionó. Así, a grandes rasgos, decir que, como bien sabéis, me pasé el verano viajando por la República Checa, Alemania y, por último, Portugal, viaje del que ya no hice post alguno. Se consolidó mi relación con Madrid y toda la gente que he conocido allí, amén de que se hayan enfriado otras relaciones amistosas de fuera y dentro de mi ciudad. Yo siempre digo que se acaban quedando los que realmente se tienen que quedar contigo, ni más ni menos. Gracias al aniversario de "Pesadilla antes de Navidad" pude disfrutar de su reestreno en cines versión 3D, ya que cuando se estrenó a principios de los 90 no pude verla en la gran pantalla. Me he comprado las Barbies más importantes que todo coleccionista debería tener, de hecho inauguré hace varias semanas mi nuevo blog, dedicado enteramente a mi maravillosa y carísima colección. También se ha vuelto a activar mi galería de arte, que supongo que ya no visita nadie, pero al menos me sirve para tenerlo todo bien expuesto y recogidito. Me quedé con las ganas de ver el concierto de Madonna, pero aún más de asistir al de Aimee Mann en Lisboa. Esta última fue, asimismo, la que a mi sano juicio publicó el mejor disco del 2008, mientras que la Ciccone (por favor, dejad de llamarla ya rubiahijadeputa, ¡so borregos!) editó el peor con diferencia. Murió Susi Pop, de las Nancys Rubias, y las modernas no paraban de decir que había muerto un ídolo del pop y que se iba a convertir en leyenda; a la pobre no la conocían ni en su casa, ridículas. A mi padre le detectaron cáncer de colon y nos vinimos abajo, afortunadamente fue un error de diagnóstico y no tiene nada malo. ¡Uf! Y a finales de octubre mi empresa se cargó a más de la mitad de la plantilla, yo incluído. Eso sí, debido a la improcedencia nos finiquitaron millonariamente (a unos más que a otros) y, como no, nos despidieron entre mentiras y falsos sentimientos de lástima. Voy a ser malo: ojalá el 2009 me dé la satisfacción de ver caer a esa gentuza. La palabra "crisis" se ha convertido en la ídem más aborrecida por mi persona. Todo el mundo la pronuncia y ya me tienen hasta el coño. ¡Sois destructores! Ah, y me encontré a mi ex en un autobús de Madrid tras 5 años y 4 meses sin vernos. La probabilidad de encontrarnos en una ciudad distinta a la nuestra era nula, así que menuda coincidencia.

Creo que fue en Lisboa donde me entró la manía persecutoria y decidí que cuando regresara a mi casa iba a eliminar algunas fotos de mis blogs o que simplemente cubriría los rostros. Uno se acaba soltando el pelo y cuelga fotos de sí mismo en todo su esplendor, sin saber hasta qué punto te estará viendo alguien conocido que no quieres que te vea o alguien que luego te puede perseguir por la calle o vete tú a saber. Recuerdo mi era fotolog del año 2005. Cantidad de veces me dejaban mensajes en plan "te he visto por la calle, llevabas una chaqueta roja" o "una amiga mía te vio desde el autobús, ¡eres lo más parecido a una celebridad!" y, creedme, la sensación al principio es divertida, pero luego te da qué pensar. Creo que se ha perdido el miedo a mostrarse en la red de redes y que a todo ésto se le debería tener un cierto respeto.

Hace muchos años me dijeron que en un diario daba mala suerte escribir la palabra "espero" porque decían que podían no cumplirse los deseos, y yo, que soy supersticioso sólo para las cosas que me convienen, decidí no usarla nunca más. Por ese motivo diré que en el año que está a punto de comenzar me gustaría que pasaran una serie de cosas, como por ejemplo:

-Encontrar un nuevo trabajo, y la verdad es que no estoy haciendo gran cosa por buscarlo en Murcia precisamente.
-Establecerme finalmente en Madrid, ya que esta vez no tengo obligaciones que me aten a mi ciudad (más allá de las familiares y amistosas, claro está).
-(relacionado con el punto anterior) Irme a vivir con mi novio.
-Dejar de tontear de una vez por todas con el tabaco. Dentro de un mes hubiese cumplido 4 años como ex fumador, por eso os digo que si alguna vez lo dejáis, NUNCA os fuméis un cigarrillo movidos exclusivamente por el buen rollo que reina en los botellones, porque después de ese vendrán muchos más, y el día que le perdáis el miedo/respeto a comprar un paquete entero será vuestra perdición. Punto a mi favor, dentro de lo malo: no he vuelto a fumar ni por asomo lo mismo que antaño.
-Seguir con mi plan de no comprar compulsivamente cosas que, en realidad, no necesito. Ya llevo dos meses y se nota en el extracto del banco. ¿Las mejores ideas para lograrlo? Salir de casa sin dinero/tarjeta de crédito y, por supuesto, no ir a ver tiendas cuando no necesites comprar nada.
-Prepararme unas oposiciones en una academia. La duda está en si me las preparo para Murcia, para Madrid o para el Estado en general.
-No perder el tiempo ni el dinero en gimnasios ni piscinas, porque no voy a durar más de 2 o 3 meses.
-Contar hasta 10 antes de explotar por culpa de los nervios, el cabreo y la histeria.
-No comprar nada más en eBay hasta que no me llegue el paquete anterior. Hace dos semanas recibí 8 de golpe y porrazo y mis padres me dijeron que qué narices era ésto...
-Aprender a cocinar, a hacer una colada y a planchar. ¡Glup!
-Tomarme más en serio mis aptitudes artísticas y hacer algo con ellas YA.
-Ver de una maldita vez tooooodos los dvd's que tengo aún precintados.
-Realizar los viajes que tengo pendientes, quién sabe si a Londres, París, Roma, Florencia, Budapest, York, Estambul... incluso a las antiguas repúblicas soviéticas.
-Tener como mascota un divertido y monísimo cerdo vietnamita al que ponerle algún nombre estrambótico y absurdo tipo Singapur.

De modo que mientras transcurran los 12 próximos meses y veamos si se cumplen o no estos propósitos, sólo me queda desearos una feliz salida/entrada de año y que todos tengamos salud, dinero y amor, que mira que es un cliché, pero no se puede pedir ni desear nada mejor. Sigo sin saber qué haré esta noche, pero de momento lo que sí sé es que me voy a perder una fiesta en Madrid a la que me moría por asistir, pero como la profesión de Gunillo es tan poco estable a la hora de hacer planes, me he quedado en mi entorno, en el que confío pasar una velada en condiciones.